sábado, 16 de enero de 2010

[Im]Probable.



La Real Academia define la palabra imposible como algo que no tiene facultad ni medios para llegar a ser o suceder, y define improbable como algo inverosimil, que no se funda en una razón prudente. Puestos a escoger a mi me gusta más la improbabilidad que la imposibilidad, como a todo el mundo supongo. La improbabilidad duele menos y deja un resquicio a la esperanza, a la épica.

Que David ganara a Goliat, era improbable, pero sucedió.
Un afroamericano habitando la casa blanca, era improbable, pero sucedió.
Que los Baron Rojo volvieran a tocar juntos, era improbable, pero también sucedió.
Nadal desvancando del numero uno a Federer.
Una periodista convertida en princesa.
El 12-1 contra Malta.

El amor, las relaciones, los sentimientos no se fundan en una razón prudente, por eso no me gusta hablar de amores imposibles, sino de amores improbables. Porque lo improbable es, por definicion, probable. Lo que es casi seguro que no pase... Es que puede pasar.

Y mientras haya una posibilidad, media posibilidad entre mil millones de que pase...Vale la pena intentarlo.

lunes, 11 de enero de 2010

Y cómo no desear una realidad así.



Y vuelves a atrapar mi tristeza para esconderla en tu bolsillo, para alejarla de mí. De nuevo has sembrado el jardín de mis pesadillas con nuevos sueños, con otras esperanzas. Y yo sigo llena de amor por todo aquello que te pertenece, llena de celos por todo lo que te roza y me quita un trocito de ti. Y tú sigues aquí, entregándome la vida en cada suspiro, suplicando por mis besos sin saber que ni siquiera tienes que pedirlos... Porque son tuyos, porque yo ya no soy mía, sino tuya.






Sólo hay una cosa que me da miedo...
Podríamos no habernos conocido nunca.